Si hay una belleza que todavía no habías conocido, te la presentamos. Este increíble philodendron plateado originario de Ecuador tiene unas mágicas hojas que al crecer se acentuan. Un verdadero placer para la vista.

Este bebé es un filodendro rastrero, no un trepador. Por eso cultivarlo en una maceta ovalada será ideal para su desarrollo de raíces. Al ser Aroid, ten en cuenta un sustrato con buen drenaje rico en perlita y carbón activo. Crecerá mejor en una habitación luminosa con luz solar indirecta. También le gusta la tierra húmeda, pero no demasiado. El mejor método para ver si su planta puede necesitar riego es verificar si los primeros centímetros superiores del suelo se sienten secos. Finalmente, le gusta que la pulvericen, ¡esto también ayuda a mantener sus hojas frescas, limpias y brillantes!